miércoles, 13 de octubre de 2010

Algunas normas (pocas, tranquilos)

Compartir Compartir
Estoy pensando en un post sobre una opinión acerca de un hecho de actualidad, pero antes quiero hacer una especie de declaración de intenciones:

Este blog es mi casa, y en él digo lo que quiero. Los comentarios de momento no van a ser moderados y por supuesto admito discrepancias, pero no insultos (y aunque no seré estricto, yo pongo el límite de cuándo me siento insultado).

Rectificar es de sabios (aunque, FG dixit, hacerlo todos los días es de necios) y yo aspiro a la sabiduría. Ocasionalmente tras haber opinado, bien por argumentos oídos/leídos por ahí, bien ante comentarios, cambiaré de opinión. O simplemente puede que en distintos momentos defienda posturas, si no contradictorias, al menos diferentes. Agradeceré que se me recuerde mi postura anterior, pero no que a raíz de ello se me ataque (a mí o a mis argumentos). Cuando sea el caso, trataré de aclarar mi cambio de opinión o de matizar las diferencias entre una y otra situación que han provocado distintas respuestas ante casos similares.

Supongo que se me ocurrirán más cosas que poner aquí. Cuando suceda, si aprendo a modificar entradas, corregiré ésta; y en caso de no poder hacerlo, haría otra (esto crece…)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Aquí puedes dejar tu comentario. Trataré de leerlo (y en su caso contestarlo) lo antes posible.